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Izadi, la recién nacida que dará la vuelta al mundo… ¡en bici!

Endika Abia e Izadi

Aquejada de atresia esofágica, fue operada de urgencia a las 57 horas de llegar al mundo. Recuperada, sus padres pretenden recorrer el planeta con ella.

Izadi con su padre, Endika Abia // Heading Nordkapp
Aquejada de atresia esofágica, fue operada de urgencia a las 57 horas de llegar al mundo. Recuperada, sus padres, avezados aventureros, han planificado un viaje conjunto en el que recorrerán el planeta durante los próximos dos años. Recaudarán fondos para ONG de ayuda infantil

Hace unos meses os contábamos la historia de Endika y Agnieszka, bilbaíno él, polaca ella, una pareja de trotamundos que, cómo no, se conoció viajando. Él, Endika Abio, lleva 47 países visitados y más de 30 mil kilómetros recorridos en bicicleta, tal y como relata en www.headingnordkapp.com, la web en la que cuenta las aventuras vividas durante el último lustro. «El mundo en bici. Diarios de viaje y fotos», es su encabezado.

Ella, Agnieszka, no es ciclista, sino mochilera. Una «aventurera dispuesta a disfrutar», como nos contaba la vez anterior, asegurando que lo que ellos hacen, en cualquier caso, «no es turismo».

Endika Abia y Agnieszka en uno de sus viajes

Endika Abia y Agnieszka en uno de sus viajes // Heading Nordkapp

Ahora, sin embargo, ambos llevan un tiempo sin echarse al monte, las carreteras ni los caminos. ¿La razón? La llegada al mundo de Izadi, su hija, quien nació el pasado 26 de junio en Gliwice, Polonia, con no pocas complicaciones: le diagnosticaron atresia esofágica y hubo de ser operada de urgencia en sus primeras 57 horas de vida. Todo un shock para estos padres primerizos que, por muchas vicisitudes a las que se hubieran enfrentado previamente durante sus andanzas, nunca habían tenido (ni temido) semejante contrariedad.

Recuperada la niña, sus padres sintieron como nunca «lo frágil que es la vida», pero, lejos de acomodarse y poner a la pequeña entre algodones, decidieron que ellos y ella, los tres, tenían que embarcarse en una nueva aventura que, además, sirviera para contar la historia de Izadi y ayudar a otros bebés que nacen con patologías.

De esta manera, recorrerán el mundo en bici durante los dos próximos años, documentando el viaje a través de Internet y grabando imágenes para lo que será, posteriormente, todo un documental. Gracias a donaciones y patrocinios, recaudarán fondos para ONG de ayuda infantil. Es lo que ellos han denominado «Izatrip».

Izadi en el hospital

Izadi en el hospital // Heading Nordkapp

¿Qué tal está Izadi? ¿Cómo fueron aquellas primeras horas y días?

Endika: Ahora esta recuperada. Ya hemos hecho los controles rutinarios de después de la operación y completado el tratamiento y todo ha ido bien. Solamente tiene que tomar suplementos de hierro. La atresia esofágica consiste, básicamente, es que el esófago no llega hasta el estómago, por lo que el alimento se pierde en un punto vacío. Ademas, a ella la traquea llegaba al estómago, por lo que podría haber tenido problemas respiratorios. Afortunadamente, lo detectaron al de pocas horas de nacer, fue trasladada del hospital donde nació en Gliwice a otro mas especializado en Zabrze. Allí la operaron por toracoscopia y le salvaron la vida. Esas primeras horas y días fueron muy difíciles. Estuvimos en shock, pero la atención hospitalaria fue genial.

Decís que haber vivido eso os ha hecho daros cuenta del valor de estar vivos y de la necesidad de aprovechar el tiempo. ¿Os ha cambiado la percepción que teníais del mundo y de las cosas importantes?

Agnieszka: Después de haber dado a luz y de su operación me he dado cuenta de que estamos aquí solo por un tiempo y que la vida no sabemos cuándo comienza ni cuándo será tiempo de irnos.

Endika: Estar un mes yendo a diario al hospital para verla solo durante un máximo de 4 horas fue duro. Ahora que está en casa, podemos valorar lo que tenemos. Estamos de paso, y, aunque ya era partidario de aprovechar el tiempo, ahora soy mas consciente de ello y de lo frágil que es la vida.

No dejasteis de viajar durante el embarazo, ¿verdad? Realmente, Izadi ya ha visitado unos cuantos países…

Endika: Solamente paramos a partir de mayo, prácticamente, aunque llegamos a Europa en enero ya con vistas al nacimiento. Lo que no sabíamos era si nacería en Polonia o en Londres, donde Agnieszka ha residido los últimos 15 años. Dentro de la tripa Izadi ha visitado 11 países: Guatemala, México, Perú, Bolivia, Brasil, Colombia, Estados Unidos, Reino Unido, Polonia, Eslovaquia y España. Y ha volado 12 veces en avión.

Endika Abia y Agnieszka en uno de sus viajes

Agnieszka siguió viajando embarazada // Heading Nordkapp

4- ¿Cómo de duro es viajar tanto, a vuestra manera, con un bebé en el vientre?

Agnieszka: Bien, porque al menos no estaba trabajando en una oficina, asi que podía hacer lo que quisiera, tenía más libertad. Así, por ejemplo, hice un curso de yoga de 3 semanas en Cali (Colombia) cuando estaba embarazada de 3 meses y, después, una semana de meditación vipassana en Inglaterra más otra en Barcelona. Durante el tiempo de viaje, cambié mi mochila por un trolley más cómodo. Al principio reduje el contenido de la mochila a muy pocas cosas. Pero, con todo, a veces era exhausto, lo que es normal al estar preñada. Pero, en general, no puedo quejarme porque tuve un buen embarazo.

Y ahora, os proponéis un nuevo reto, los 3…

Endika: Consistirá en viajar en bicicleta. La primera etapa, que comenzará el 1 de marzo de 2020, será de Bilbao a Londres, unos 2.000km recorriendo Francia de sur a norte en dos meses. Izadi irá en un remolque. Queremos que este proyecto sea solidario y por eso estamos contactando con organizaciones no gubernamentales o fundaciones que puedan estar interesadas en colaborar para entre todos recaudar fondos para niños enfermos. Iremos documentando el viaje a través de una web y redes sociales. También queremos hacer un pequeño documental en vídeo para que pueda inspirar a viajar con niños pequeños.

Endika Abia y Agnieszka, con Izadi

Ya en casa // Heading Nordkapp

Vosotros, ¿de qué viviréis durante esos 2 años?

Endika: Reduciremos el presupuesto al mínimo y echaremos mano de nuestra experiencia para viajar low cost. Utilizaremos redes de hospitalidad como Warmshowers o Couchsurfing, acamparemos y cocinaremos nuestra comida. Además, contaremos con algún patrocinador que pueda aportar material. En cuanto a la financiación, principalmente provendrá de ahorros, de venta de material fotográfico, de postales, de mi libro, de lo que queda de maternidad a Agnieszka… incluso hemos pensado vender artesanía, o hacer workaway (trabajar a cambio de alojamiento y comida) o algún trabajo online.

¿No os asusta la idea de que pueda ser peligroso para una niña tan pequeña? 

Endika: Sí nos da respeto, pero creemos que un bebé se adapta a la forma de vida de forma natural, creemos que el estar en movimiento todo irá fluyendo de forma natural y será beneficioso para ella. Nos da reparo que pueda ponerse enferma, pero el clima de los países a visitar será suave y las condiciones higiénicas adecuadas. Iremos a un ritmo más lento, planificando todo mejor, al ritmo que Izadi vaya marcando. También contrataremos un seguro.

Endika Abia y Agnieszka

Izadi ya conoce mundo // Heading Nordkapp

Durante el primer año, al menos, circularéis por países bastante desarrollados… supongo que tampoco habéis querido arriesgaros innecesariamente. ¿De qué dependerá el trazado de la ruta del segundo año?

Endika: Exactamente, hemos elegido el recorrido teniendo en cuenta que iremos con un bebé de entre 7 meses y un año y medio. Por eso, no iríamos a países como la India. La ruta del segundo año dependerá de cómo haya ido el primero. Será un punto de inflexión donde valoraremos si seguimos hacia Australia o Nueva Zelanda, o si damos el salto a Sudamérica. Iremos viendo. Dependerá de cómo andemos de dinero, fuerza, etc. Por eso, de momento, la planificación es para el primer año.

¿Qué es más duro y emocionante? ¿Hacer un Bilbao-Malasia en bici… o ser padres primerizos?

Endika: Creo que es más duro ser padre primerizo, por la falta de sueño, pero también la recompensa es mayor. Son cosas difíciles de comparar, diferentes.

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