Cabezas de cartel de la fiesta Wave Rave que precederá al festival Bay Of Biscay, los ingleses regresan a Euskadi 10 años después de estrenarse en una tierra con la que mantienen una unión especial. Te explicamos el porqué
La primera vez que vimos a Crystal Fighters en directo fue en el Kafe Antzokia de Bilbao, hace ahora 10 años. A pesar de que no era la banda más esperada de la primera jornada de Bilboloop 2009 (la expectación recaía sobre los galos The Teenagers), sí que fue la gran sorpresa de la velada. Como recuerda Fernando Gómez, codirector del festival (especializado en destapar joyas del underground -francés e inglés, sobre todo-), «su concierto fue una gran fiesta que sorprendió a la gente. Pusieron la sala patas arriba y contagiaron a todos los presentes con sus ritmos y actitud. La gente flipó».
Por aquel entonces, el grupo no disponía de ningún disco en el mercado, a excepción de un par de temas publicados en sendos recopilatorios del sello francés Kitsuné (Phoenix, Hot Chip, Klaxons, Two Door Cinema Club…): las anfetamínicas «I Love London» y «Xtatic Truth«.
«Sí, así es como llegaron a nuestros oídos», rememora Gómez. «Nos hablaron de una banda inglesa y de su ‘I Love London’ y la verdad es que nos moló la primera vez que escuchamos ese recopilatorio -se refiere a ‘Kitsuné Maison Compilation 8‘-. A partir de aquí, empezamos a seguir al grupo y a recabar información y, apareció el ‘Xtatic Truth’ -publicado como single posteriormente, aunque ya había sido incluido en ‘Kitsuné Maison Compilation 7‘- y el curioso dato de que su nombre provenía de una ópera escrita e inspirada en el País Vasco por parte de un familiar de una de las chicas que acompañaban a la banda. Tras conocer esa historia y ver que tocaban la txalaparta no hubo duda, teníamos que incorporarlos como fuera al Bilboloop’09».
La historia que rescata el capo de Bilboloop originó en su día un efecto «teléfono escacharrado» que hizo que Sebastian Pringle, Gilbert Vierich y Graham Dickson fueran tomados por «vascos», «navarros», «vascofranceses», «anglovascos», «vasco-británicos» o «angloespañoles» durante mucho tiempo, tanto, que aún hoy uno puede comprobar cómo, por ejemplo en Wikipedia, la procedencia del combo varía de manera estrepitosa según la versión que se consulte.
Cuestionado sobre si el hecho de que se los tomase como una banda «de casa» contribuyó a que fueran tan bien acogidos por estos lares, Félix Suárez, el Jefe del departamento de promoción del que fuera su sello discográfico, [PIAS] Iberia & Latin America, lo tiene claro: «Ciertamente, que pusieran que eran de Barakaldo en su perfil de MySpace -a día de hoy, en Facebook, dicen ser de «Navarre, Spain»- ayudó lo suyo. Algunos periodistas hasta nos preguntaron si hablaban euskera cuando nos pedían entrevistas… Luego ellos demostraron un conocimiento e interés por nuestra música poco habitual …». En Bilboloop coinciden, a pesar de que «realmente» conocían «poco» de la cultura euskaldun allá por 2009. Pero sí, «mostraban mucho interés por conocerla y estaban entusiasmados por haber llegado al País Vasco y actuar por primera vez».
Lauburus utilizados a modo de icono en su web; un disco de debut («Star Of Love«, 2010) cuya portada reproducía la imagen de los protagonistas del carnaval de Lantz; videoclips con locuciones en euskara («Follow«) o parte de la letra en castellano («I Love London«); que presentaran su segundo álbum («Cave Rave«, 2013) en las cuevas de Zugarramurdi; que alquilaran una casa en Berango (Bizkaia) «para buscar inspiración» o que asistieran a una fiesta organizada por BI FM en Bilbao; son solo unos cuantos apuntes acerca del apego que le tienen a nuestra tierra estos británicos de pura cepa. Por no hablar, claro, de las mil y una actuaciones que, a estas alturas, nos han brindado en los últimos tiempos, bien en salas (cada vez de mayor aforo), bien en festivales (en prácticamente todos) o en eventos como el MTV World Stage Bilbao celebrado el año pasado en el estadio de San Mamés.
Pero, ¿es o no es el español el principal mercado del grupo? Desde luego, parece que en ningún otro lugar son tan bien considerados. Suárez difiere. «España es muy importante para ellos, pero también les va muy bien en México, Francia, Alemania, Austria, Polonia, Italia… Si solo funcionaran aquí no se habrían tirado dos años y medio de gira mundial».
Ahora están de actualidad por «Gaia & Friends«, su cuarto álbum de estudio, con el cual han saltado a toda una multinacional, Warner Music, y que contiene colaboraciones de artistas como Bomba Estéreo, Petite Noir, Soledad Vélez o Ugarte Anaiak. Ninguno de ellos estará el 24 de julio en la fiesta Wave Rave de Bermeo, anticipo de la primera edición de Bay Of Biscay Festival (heredero del ya extinto Mundaka Festival) que tendrá lugar del 26 al 29 de julio. Belako, Hinds, Niña Coyote eta Chico Tornado, Maren, Bad Gyal y DJ Marfox serán quienes acompañen en el escenario a los protagonistas de este artículo.
36 kilómetros y una década separarán este nuevo baño de masas de aquel debut, más íntimo, del festival Bilboloop. Ongi etorri etxera, Crystal Fighters!