¿Positivo porque fomenta el deporte o una borregada? ¿Puro espectáculo o todo lo contrario, porque es un juego simple y repetitivo? Los amantes y detractores del balompié nunca estarán de acuerdo. Y, ahora que en Rusia se juega el más importante de los campeonatos… menos. ¡Es la guerra!
“¿Me estás diciendo que no vienes al concierto porque hay un partido de fútbol?” Así comenzó la discusión. “Un partido de fútbol, no, ¡un Alemania-México del Mundial!”, replicó Vegas. «Pues lo mismo me da, menudo motivo de pacotilla», afirmó Arteche. ¿»De pacotilla? ¡Que es un Mundial, tú!» «Pues eso, menuda mierr…» La guerra acababa de declararse.
Alejandro Arteche y Joseba Vegas nunca está de acuerdo. A uno le gusta el country y al otro el indie. Uno lleva tupé y el otro flequillo. Uno es de boxeo y el otro, sí, de balompié. Creepers versus gazelles. Dulce y salado. Ana Rosa contra María Teresa. Apueste por una.
Un lance del Mundial de Rusia 2018 // FIFA
Hoy es el Mundial de Fútbol (tan de actualidad por Rusia 2018) el motivo de desencuentro, pero podría haber sido cualquier otra cosa. Y tú, ¿de quién eres?
A FAVOR Y EN CONTRA DE… EL MUNDIAL DE FÚTBOL
A favor (Joseba Vegas): Es la más alta competición del mundo a nivel de selecciones. Es deporte (algo bueno, ¿no?) de la mayor calidad.
En contra (Alejandro Arteche): Los que hemos vivido en blanco y negro sabemos lo importante que era. Gracias a él entraron las televisiones de color en nuestras vidas. En mi caso con Argentina 78 y en muchos otros en España 82. Esos dos mundiales fueron clave para que en España la gente comprara su primera TV en color, y no veas qué diferencia era luego ver en brillantes colorines los programas de Valerio Lazarov o los festivales de Eurovisión (cuando estos eran buenos). Vamos, que, para empezar, estoy bastante a favor, realmente.
A favor: Fomenta la práctica deportiva… pero, además, promueve la interacción y camaradería entre personas de diferentes países, continentes, razas, religiones y costumbres.
En contra (o así): Vale, vale. Y el espectáculo. ¿Ya no se hacen las ceremonias inaugurales con balones gigantes que se abrían y salían palomas? y niños, muchos niños. y bailes, danzas, música… ¿Eso ya no se hace? Y luego para los que amamos el diseño gráfico estaba el tema de las mascotas: Naranjito, Sport Billy… Todo el merchandising que había alrededor de ello. Cuadernos, gomas de borrar, dibujos animados… ¿Tampoco hay mascotas carismáticas como antes? Y Adidas, no nos olvidemos que Adidas todos los mundiales sacaba un balón con un diseño nuevo. Que sí, que ahora es lo más normal del mundo pero en esa época el salirse del balón normal de trozos blancos y negros era todo un notición.
Ah, y no nos olvidemos de la música. ¡Ya no se hacen canciones para el mundial! O no como antes… ¡Si hasta New Order hizo una! Y antes de eso, Lola Flores con «Mi Mundial 82». ¡Que Ennio Morricone hizo el himno del mundial del 78! Y grabaron canciones hasta Los Nins y Pepe Da Rosa. Lástima que la calidad bajara cuando Rosana se puso a cantar con la selección española y ya de ahí para abajo con Shakira o Ricky Martin…
A favor: Ocurre cada 4 años… Normal que haya expectación. No se puede decir que sea un campeonato cansino. Es solo un mes cada 48, es algo corto y muy intenso.
En contra: Las Olimpiadas también ocurren cada 4 años y tienen más variedad. Puedes ver gimnasia, esgrima, carreras, natación y algo encontrarás que te guste… Aquí es todo el tiempo 22 memos en calzoncillos corriendo tras una pelota. Si te gusta, bien, porque tienes sobredosis. Si lo odias, no hay escapatoria. ¡Joder, si hasta me han recortado «Sálvame» por las tardes!
El Mundial: Enfrentados… pero unidos
A favor: Permite que países cuyos talentos han de desarrollar su carrera lejos de casa puedan disfrutar en primera persona de sus estrellas (sería impensable que Messi jugara en la liga argentina o Cristiano en la portuguesa).
En contra: Lo que es impensable es que estos señores no estén ya en la cárcel con todos los delitos que han cometido.
A favor: Hace que la gente pueda evadirse de sus problemas y vibrar durante unos días… incluso sintiéndose orgulloso o parte de un país al que critica durante los cuatro años restantes. Otra cosa es que la cabeza no te dé para pensar más que en fútbol, pero ese es otro tema (ya que gustarte el balompié -el baloncesto, el ciclismo, los videojuegos, el rock and roll, el cine o la cocina- no te incapacita para tener otros conocimientos, otras aficiones e, incluso, una conciencia social). No me vengas con lo de «pan y circo»…
En contra: ¿Hay gente que se siente orgullosa de pertenecer a un país porque su equipo gane? Pero, ¿y esa gente vota y su voto sirve para elegir presidentes de gobierno y eso? Claro, así entiendo muchas cosas.
A favor: Permite que países pobres puedan mojarle la oreja a superpotencias occidentales. De hecho, pasa (y, claro, que David gane a Goliath siempre motiva más). Es justicia poética, muchas veces.
En contra: Gracias a esta «integración» la vuvuzela llegó a nuestras vidas. Mira que bien.
A favor: Permite que viejas glorias como Maradona, Cantona o Camacho (bueno, ahí igual me he pasado) recuperen protagonismo. ¡Hay que respetar a los mayores! A ver qué dices sobre esto, señor mayor (desde el respeto).
En contra: Yo creo que Cantona y Maradona no han perdido protagonismo nunca. ¿Uno no hace películas y el otro no sigue drogándose por todo el mundo? Lo que me sorprende es que Camacho siga por ahí.
El Mundial, desde arriba // FIFA
A favor: También hace que la gente más joven se contagie del espíritu colectivo, sabiendo que son muy importantes el trabajo en equipo y la superación personal. Curro, disciplina, solidaridad, respeto… todo eso debería transmitir el Mundial.
En contra: No. El fútbol, como los realities de TV, lo que transmiten es que se puede ganar mucho dinero de forma fácil y sin tener estudios ni preparación. Mira todos los domingos las tanganas que se montan en los partidos infantiles entre padres desesperados que piensan que su churumbel les va a retirar en un par de años cuando lo fiche uno grande. ¡Pero si tiene que ir hasta la policía!
A favor: Y diversión. También ha de transmitir diversión. De hecho, lo hace. Jugar al fútbol es algo muy divertido. Y, aunque no sepas lo que es darle una patada a un balón, ver el Mundial, a poder ser con amigos, picoteo y bebidas frías… ¡es algo insuperable! Bueno, hay cosas mejores… pero no pueden emitirse en prime time.
En contra: ¿Cómo que no? prueba a ver la final de «Supervivientes» o un episodio de «Maestros de la costura» o un «Sábado deluxe» en conexión online con tu grupo de mejores amigos del guasap.
A favor: Los peinados y tatuajes de Cristiano, Neymar y compañía. Una fantástica guía para saber qué NO hacerse (y distinguir fácilmente por la calle a la gente sin personalidad, jajaja). Si no ves el Mundial… ¡te pierdes esas valiosas referencias!
En contra: No tanto. Ahí tienes a concursantes de «Gran Hermano» o de «Mujeres y Hombres y Viceversa», que es un poco lo mismo y también sirven de referencia para lo que NO se debe llevar. ¡Ah! ¿Dónde quedan aquellos pelazos de Valderrama, los mullets ingleses o los bigotes a lo Pablo Abraira de los jugadores de los 80?
