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Ocio y cultura

La BOS se reinventa tras el confinamiento con un innovador ciclo gratuito en Azkuna Zentroa

Cada jueves de agosto, Musika Loturak ofrece dos conciertos que combinan grandes clásicos y obras contemporáneas

La BOS, en el estreno de Musika Loturak en Azkuna Zentroa
Todos los jueves de agosto, Musika Loturak ofrece, en un marco informal en el centro de Bilbao, dos conciertos (18:30 y 20 h.) en los que la orquesta entremezcla grandes clásicos con composiciones contemporáneas y más experimentales

Los responsables de la Bilbao Orkestra Sinfonikoa (BOS) lo vieron claro cuando desde Azkuna Zentroa les propusieron, allá por mayo, aún en pleno confinamiento, colaborar. “¿Qué mejor lugar para volver, cuando fuera posible, a las actuaciones en directo y con público que ese atrio de techos altísimos, donde se está casi casi al aire libre y donde se dispone de espacio de sobra para garantizar la distancia de seguridad?”, valora Borja Pujol, director técnico de la orquesta bilbaína. Con su pasada temporada prematuramente finiquitada en marzo, sin haberse podido juntar para ensayar y con la incertidumbre propia de aquellos tiempos predesescalada, tenían claro que lo prioritario era la seguridad y la salud pública, pero a la vez que la cultura no podía permanecer en cuarentena mucho más.

Así, ambas instituciones se pusieron manos a la obra para diseñar Musika Loturak, un innovador programa cuyo objetivo era no solo que la BOS volviera a la actividad y pudiera ofrecer a sus fieles su música en un entorno seguro, sino también acercarse al llamado Centro de Sociedad y Cultura Contemporánea Azkuna Zentroa, tanto a su público como a sus líneas de programación habituales, más cercanas a la creación contemporánea que al repertorio que normalmente asociamos a una orquesta sinfónica.

La BOS, el pasado 6 de agosto en Azkuna Zentroa

Aún en la distancia, AZ y BOS fueron intercambiando ideas. Los primeros lanzaban nombres de compositores y piezas actuales, de los siglos XX y XXI, y los segundos iban seleccionando y trabajando los que mejor les encajaban. De esta forma, se fueron confeccionando los repertorios de lo que acabaría siendo Musika Loturak, citas de entrada libre cada jueves de agosto que presentarían a la BOS en directo en el Atrio de las Culturas de AZ pero en formatos inusitados (pequeños ensembles o grupos de cámara), lejos de la habitual gran orquesta sinfónica de casi 100 integrantes que, ahora mismo, tampoco sería viable juntar sobre un escenario por normativa sanitaria.

“Solo dos días después de nuestro primer ensayo conjunto tras el confinamiento, nos estrenamos en Azkuna Zentroa el jueves 6 de agosto. Fue con una formación de unos 40 músicos que, por primera vez, no compartían atriles y se situaban a metro y medio unos de otros. Para la ocasión elegimos una selección de oberturas que servían de alegoría de la vuelta al directo, al trabajo”, explica Pujol. Ese día, entre piezas de obras archiconocidas como el “Cosi fan tutte” de Mozart o “El barbero de Sevilla” de Rossini, se colaba “Infinite String”, creación de Dai Fujikura, un japonés que apenas supera los 40 años de edad. Fue un ejemplo paradigmático de lo que querían lograr con estas actuaciones: “ofrecer al público algo más que piezas ya convertidas en clásicos, regalarles la oportunidad de escuchar en vivo obras que no es habitual que se programen, obras que, además, a nosotros como orquesta también nos espolean y nos sacan de nuestra zona de confort”.

Mañana, jueves 13 de agosto, Musika Lorturak continúa. Lo hace con la presencia de un conjunto de 11 vientos que incluirán en su repertorio obras experimentales de principios del siglo XX, partituras que entonces fueron incomprendidas y que hoy, 100 años después, “siguen sonando a nuevas”, valora Pujol. Habrá otra cita el 20 de agosto con, entre otras, tres piezas para un cuarteto de trombones, y una última el jueves 27, en la que se podrá disfrutar de otro rompedor cuarteto, en este caso, de percusión, algo que, seguro, descolocará a muchos que se acerquen con ideas preconcebidas sobre lo que es una “orquesta sinfónica”. Además, para ese último día del ciclo se ha elegido un programa «especialmente contemporáneo», prometen. Tienes todos los detalles al pie de este reportaje.

De esta forma, Musika Loturak se extenderá durante todo agosto, con una doble cita cada jueves del mes (puesto que de cada concierto hay dos pases -a las 18:30 y a las 20 h.-). Todas las actuaciones son de entrada gratuita y están diseñadas para un aforo máximo de unos 100 espectadores, que se sentarán frente a la BOS en pleno Atrio de las Culturas de Azkuna Zentroa, en un marco informal y abierto. Y siempre, claro, guardando las distancias de seguridad que impone la actual situación sanitaria.

De cara a su próxima temporada 2020-2021, que la BOS de Bilbao espera poder arrancar en octubre en su sede habitual del Palacio Euskalduna, tienen previsto comenzar con un repertorio de obras para formaciones de entre 40 y 50 músicos (frente a los 80 o 90 que integran su equipación habitual). Más que nada porque sería inviable que el escenario los acogiera a todos separados entre 1,5 y 2 metros. “No hemos querido adaptar las obras de la temporada a ese formato de poco más de la mitad de nuestros músicos, sino que hemos preferido seleccionar nuevas partituras que hubieran sido originalmente concebidas para ser tocadas por grupos más pequeños. Al menos hasta enero. Después, iremos viendo cómo evoluciona la situación, para lo que en esa segunda parte de la temporada hemos programado obras “acordeón”, es decir, que pueden adaptarse para grupos flexibles, desde 50 a 70 instrumentos. Esperamos que para entonces la normativa nos vaya permitiendo ampliar el número de músicos en escena”, conjetura Pujol.

Antes de todo eso, la BOS tendrá una primera toma de contacto tras el confinamiento con su público más fiel y sus abonados de una forma más ortodoxa que la que proponen en Musika Loturak. Será el próximo martes (18 de agosto) en el Palacio Euskalduna de Bilbao, en un concierto extraordinario bajo la batuta de su director titular Erik Nielsen (quien también comandará las citas de los jueves en Azkuna Zentroa). Durante aproximadamente una hora, interpretarán obras de Mozart, Rossini, Copland, Ravel y Prokofiev. «Esta imposición de tener que tocar a metro y medio nos está viniendo bien para que cada miembro de la BOS sea más independiente y esté aún más preparado», valora Pujol buscando el lado positivo a la situación. «Al no estar pegado a los compañeros, ya no vale mirar o sentir, hay que hilar más fino, escuchar muy bien y a la vez asumir responsabilidades. No está siendo mal entrenamiento». Las entradas para el concierto en el Euskalduna el 18 de agosto están a la venta a un precio especial de solo 6 euros (5 para abonados).

MUSIKA LOTURAK 2020

La BOS de Bilbao en Azkuna Zentroa. Entrada libre (hasta completar aforo). Doble pase, a las 18:30 y a las 20 h.

6 de agosto

Wolfgang Amadeus Mozart. Cosí fan tutte, Obertura.
Dai Fujikura. Infinite String.
Wolfgang Amadeus Mozart. Don Giovanni, Obertura.
Gioachino Rossini. El barbero de Sevilla, Obertura.

13 de agosto

Edgard Varêse. Octandre.
Antonin Dvorák. Serenata para instrumentos de viento.

20 de agosto

Ludwig van Beethoven. Drei Equali.
Marc Monnet. Open.
Soichi Konagaya. Despertar de un sueño.
Sergei Prokofiev. Sinfonía nº 1 en Re mayor.

27 de agosto

Gérard Grisey. Stèle.
Philippe Spiesser. Uracan.
Ed Argenziano. Stinking Garbage.
Eckhard Kopetzki. Le chant du serpent.

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