Coincidiendo con la «Fiesta del Cine», por fin llega a nuestras pantallas la película sobre Amy Winehouse protagonizada por una Marisa Abela de alto octanaje. Además, otro biopic musical: «Segundo Premio», sobre Los Planetas; y «El último late night», una montaña rusa de posesiones, sustos y tensión
Recuerdo perfectamente dónde estaba cuando murió Amy Winehouse. A mi padre le pasaba con Kennedy («¿cuál de ellos? ¡Cualquiera!») y a otros les pasará con las Torres Gemelas.
Era sábado por la tarde y me tocaba currar cuando me llegó un SMS (sí, hablamos de 2011) proveniente de un amigo que trabajaba en un periódico: «Sé que eres fan. Han encontrado muerta a Amy en su casa y quería decírtelo. La fuente es solvente pero aún no se ha hecho público.»
No me sorprendió, pero recuerdo que una decepción casi tangible me abrazó el resto de la tarde. La británica había suspendido 15 días antes su bolo del BBK Live por encontrarse en un calamitoso estado de forma y finalmente se había bebido el Támesis encerrada en su habitación.
Tras varios amagos y retrasos, ahora nos llega «Back to Black», biografía en absoluto definitiva y título de su obra maestra musical (solo público dos en vida, ese y «Frank»), un recorrido por los canales de Camden, el soul, las copas y las malas compañías (discográficas y personales) que, como cualquier bio, solo cubre algunas pinceladas de la vida del retratado.
Un filme que nunca aburre, pese a sus hechuras algo telefílmicas, cuya mayor baza es la actuación de Marisa Abela, una Amy Winehouse de alto octanaje (¡qué miradas!) que, sobrada de carisma, sale bien parada de un personaje que fácilmente podría haberla devorado.
Por contra, la película elige ser templada y eso es imperdonable con un material tan volcánico. Toda la culpa de lo sucedido es del deleznable marido de la estrella (el proxenético Blake Fielder), mientras que el padre de la artista, un turbio taxista londinense, es retratado como un hombre preocupado por la deriva vital de su hija. Cualquiera que haya visto el sobresaliente «Amy» (Asif Kapadia, 2015) sabe que no sucedió así.
¿Que nos queda, entonces? Una mujer bigger than life y una banda sonora inmensa, además de la posibilidad de verla en el cine por 3’50€, ya que su estreno coincide con la Fiesta del Cine (del lunes 3 al jueves 6 de junio).
Recuerden que tienen, además, recién salidas del horno, el retrato de Isaki Lacuesta sobre Los Planetas, «Segundo premio», película volátil, onírica, dos calles más allá de la reciente «La estrella azul»; y también ese tremendo fiestón de terror que es «El último late night», estupendo cierre del reciente FANT y homenaje a la tele en directo de los 70, donde el invitado del último programa es… Satanás. Cierto es que en Telecinco hemos visto cosas peores, pero no duden en montar en esta montaña rusa de posesiones, sustos y tensión: saldrán con el entusiasmo renovado.
