HATEM publican «Ultraviolete Catastrophe», un segundo álbum donde dejan de lado el folk rock de su debut homónimo y tiran por la senda del pop sintetizado, nostálgico por sus susletras y su querencia ochentera. Hablamos con Álvaro Sanjuán, bajista del (ahora) cuarteto
Este miércoles 10 de octubre de 2012, coincidiendo con la salida esta semana de «Ultraviolate Catastrophe» (Mushroom Pillow, 2012), el segundo disco de Hola a Todo el Mundo, hablamos en Días de Radio con la banda madrileña. En concreto, Joseba Vegas charló con Álvaro Sanjuán, bajista del cuarteto.
De salida, diremos que los HATEM del segundo disco son otros. O al menos suenan diferentes. «Sí, la verdad es que hemos intentado seguir un camino nuevo respecto a lo que habíamos hecho hasta ahora. Puede ser un cambio fuerte para quien no ha estado metido en el proceso, pero para nosotros ha sido un poco a poco, un año y pico en que nos apetecía algo distinto«. Distinta es también la propia banda, ahora cuarteto. «Hemos reducido el formato de cinco a cuatro, que es el formato con el que ya grabamos el disco«.
«Ultraviolate Catastrophe» se aleja completamente del folk rock del primerizo «Hola a Todo el Mundo» (HATEM Prayer Team, 2010) y tira por la senda del pop sintetizado. «Sí, siempre hemos hecho pop, pero si hay que ponerle un apellido, sería el de electrónico… o synth pop, como le llaman algunos. La novedad es que en toda la instrumentación de acompañamiento tienen mucha importancia los sintetizadores, ritmos, secuencias…«
Una nueva etapa que muchos tildarán de «moderna» (se viene hablando de comparaciones con Washed Out o Neon Indian, bandas del denominado sonido «chill wave»), pero se nota el influjo de proyectos gestados hace cosa de tres décadas, allá por los años 80. «Los referentes son grupos actuales, pero cuyas referencias nacen en esos años, sobre todo por los sintetizadores que utilizamos, que son todos originales de la época. Eso le da un carácter a los temas que sí que se los lleva hacia allí. Aparte, hemos intentado que tuviera un toque nostálgico, triste pero bailable, algo muy de la época«. Un claro cambio de registro así pues. «No nos gusta hacer lo mismo, nos gusta experimentar y cambiar de estilo«.
Hola a Todo el Mundo, banda cuyo nombre se tomó de un poema de Walt Whitman, sigue encontrando inspiración en la poesía. De hecho, el título del nuevo LP procede «de un poema de un escritor muy underground, muy extraño y oculto que se llama Roy Tiger Milton. Las letras se han construido en torno a un poema suyo que tiene diez partes«. Habrá quien vea estos referentes y modus operandi como algo pretencioso. Sin embargo, Sanjuán lo ve como algo «ambicioso, lo cual es un adjetivo positivo. Nos ponemos metas más allá de nuestras posibilidades, lo cual nos hace ser más dinámicos«.
