Actúan este sábado, 13 de abril, en Bilbao, en la última fecha del ciclo Punto Zero (Sala BBK). Con un segundo disco que, deslizan, será «más rock» ya en camino, charlamos un rato con las autoras de «Vicente Amor» y «Oh boi», puro riot grrrl del siglo XXI
Hablamos con Maite Gallardo (guitarra, voz), Raquel Cerro (guitarra, voz) y Charlotte Augusteijn (bajo, voz), las tres integrantes oficiales de Shego, banda madrileña de indie pop-punk que, tras varios singles y EPs publicados a partir de 2020, en 2023 editaba (vía Ernie Records) su primer disco (no tan) largo: «Suerte, chica».
Aquel álbum, de tan solo 20 minutos, contenía 8 canciones de letras ácidas e irreverentes, marcado poso feminista y gran personalidad, esa que les lleva a decir las cosas claras y a no cortarse tampoco con los estilos musicales. Todo vale. Aunque no cualquier cosa, claro.
Tras colaborar con Zahara (quien no hace mucho nos contaba maravillas de ellas) y contar con Natalia Lacunza en su disco, recientemente ellas hacían lo propio en «Amigos nuevos», junto a Ghouljaboy, casi al mismo tiempo que se lanzaban definitivamente a la pista de baile con los remixes de «Steak Tar Tar», su tema más electrónico, ahora con remezclas a cargo de Samantha Hudson (a quien también hemos entrevistado hace poco), LVL1 y la propia Zahara junto a Perarnau IV.
Por el camino, canciones que ya son pequeños grandes hits del underground como «Vicente Amor», «Oh boi» o «Pablo».
Aprovechamos su paso por la última de las fechas del ciclo Punto Zero en la Sala BBK de Bilbao, donde este sábado, 13 de abril, Shego actuarán precedidas por Tronco. Tienes entradas en este enlace.
Shego
Un año desde el disco… ¿en qué momento estáis?
Charlotte: En un momento de volver a empezar. Acabamos de grabar nuestro segundo disco, en los estudios La Mina de Sevilla, un sitio maravilloso, con Raúl Pérez, que es una persona increíble. Así que bien, con cositas nuevas y emocionadas por el futuro.
Raúl Pérez, un ilustre ya en esto de la producción. No sé si podéis adelantarnos algo sobre el nuevo trabajo.
Maite: Lo que podemos decir es que es un disco en el que hemos trabajado un montón a todos los niveles, tenemos ya un poco más de experiencia a todos los niveles. El álbum anterior fue el primero, nuestra primera experiencia grabando, y, evidentemente, no veníamos de tocar durante 15 años en bandas, así que recogimos mucho conocimiento de ahí, evitando ahora cosas que hicimos que no queríamos repetir, pero incluyendo cosas que sí que hicimos bien y que queríamos hacer de nuevo. Este nuevo disco de Shego recoge todo ese trabajo y conocimiento previo. Estamos también en otro momento de nuestras vidas, así que hemos incluido las canciones con las que hemos crecido en este momento de nuestras vidas.
Sin saber cómo suena, me lo imagino ecléctico y con colaboraciones.
Maite: No es tan ecléctico como el anterior, donde estábamos experimentando y viendo cómo se hacía un disco. Ahora hemos cogido un sonido más concreto, venimos de tocar durante tres años sin parar de girar y sabemos cómo nos gusta sonar en directo y qué es lo que nos hace vibrar, así que queríamos reflejar lo que es más fiel a nosotras. El tema colaboraciones está aún un poco en el aire, así que si tiene (risas)… tiene una o dos, como mucho.
Shego es un grupo de pop pero con momentos muy punk, siempre incitáis al pogo, aunque también os habéis acercado a la música de baile. En poco tiempo habéis hecho muchas cosas. La experiencia es un grado, dicen, pero vosotras la tenéis siendo aún muy jóvenes, ¿verdad?
Charlotte: La edad no se pregunta (risas), aunque creo que tenemos un poco más de edad de lo que parece.
Raquel: Yo creo que es verdad que llevamos poco tiempo y que en ese poco tiempo nos ha dado para experimentar con diferentes sonidos, pero ahora sí que nos hemos encontrado con nosotras mismas, con el rock, que es con lo que más cómodas nos sentimos.
Lo de la edad lo planteaba también porque hace unos meses charlaba con Zahara y ella comentaba que Shego era su banda favorita del momento, destacando vuestras «letras y falta de pudor» y asegurando que ojalá haber tenido un «referente» así cuando ella era más joven y haber tocado en una banda como la vuestra con unos cuantos añitos menos.
Raquel: Nosotras hemos podido hacer lo que hacemos, aparte de porque tenemos mucha cara, porque gente como Zahara lo ha tenido que pasar como el puto culo, aguantar un montón de críticas y un montón de ‘hate’ por todas las partes y, con todo el recorrido que lleva, ya ha llegado al punto de decir «me da igual lo que me digan». Gracias a chicas como ella nosotras podemos estar haciendo esto.
Charlotte: Totalmente.
Maite: Total.
¿Es este un momento propicio para las mujeres, o mejor al menos que cuando Zahara empezaba? ¿Se ha avanzado?
Maite: Ningún momento es propicio para la mujer en ningún caso. Pero, efectivamente, gracias a pibas que se han atrevido a hacer cosas cuando nosotras aún no hacíamos música, ahora podemos hacer música de una manera más sencilla. Es verdad que no sé bien por qué hemos sido tan bien acogidas tanto por parte del público como de la industria y de los compañeros, eso es algo que no siempre han tenido las bandas femeninas o las mujeres en la música. Se suele recibir mucho ‘hate’ por parte de crítica y público. Nosotras no hemos vivido demasiado eso, pero no considero que sea algo general. Hay un largo camino aún por recorrer.
Siguiendo con Zahara, ella alertaba sobre la «polarización». Da la sensación de que es imposible no recibir palos desde algún sitio digas lo que digas. Ante eso: ¿autocensurarse o todo lo contrario?
Maite: Puede ser que nosotras, como tenemos bastante mala hostia (risas), puede ser que tengamos menos ‘hate’. Es decir, que como somos descaradas, eso igual impone o da cierto respeto. Pero debería también estar permitida la ternura, la vulnerabilidad y lo cursi, y que eso fuera igual de respetable y poco criticado que algo que tiene una energía como más masculina. Es un poco contradictorio que se permitan espacios para la música femenina cuando viene de una rabia muy como de tío, pero que seas una puta mierda cuando estás en tu expresión más femenina.
Raquel: Siempre hay algún señorito que te suelta un comentario de mierda. Nuestro sitio depende del curro que hemos hecho, pero trabas siempre te encuentras.
¿Os seguís encontrando con muchos «Vicente Amor»?
Raquel: Constantemente (risas).
Un personaje muy de Malasaña. ¿Qué tal está por allí el ambiente, la escena, Madrid por extensión?
Maite: Malasaña está carísima, primero de todo. Yo vivo aquí y solo hay Llaollaos, sitios de boba tea y cafés de especialidad. Ya no hay escena ninguna. Es vivir en un sitio de guiris y ya. La escena es otra cosa y está pasando en barrios más alejados del centro. Que aquí nos juntemos todos es un poco triste porque en el centro no se puede vivir, básicamente. Yo pienso que, poco a poco, nos vamos a seguir yendo más de aquí, a seguir con la escena en otros barrios.
Charlotte: Yo llegué a Madrid en 2014 y se siente muy diferente. Ya no hay tanta unión dentro de la escena.
¿Vivís la noche madrileña? Os hemos llegado a ver como Shego DJ Set en el Ochoymedio.
Raquel: Nosotras no somos mucho de salir de fiesta habitualmente. Que te dejen poner tus temas favoritos una noche está muy bien, pero no somos unas asiduas de las discotecas.
Maite: No somos muy nocturnas. Por mucho que estemos dentro de la escena musical, no estamos dentro de la escena de la fiesta, que sí que hay mucha, eh. Al final, somos peña joven y salir, claro que salimos, pero no somos muy de confundirnos con la noche, que la noche confunde mucho y hay gente atrapadísima.
Raquel: Giramos mucho y los fines de semana lo que hacemos es tocar y después irnos a dormir (risas). Es nuestro plan.
Digno de alabar. Hay gente que se da cuenta de que también hay que dormir con carreras más largas. A los 40 y pico.
Charlotte: (Risas) A ver, es algo de lo que podemos estar orgullosas, porque tenemos los pies bastante bien puestos en la tierra y eso es de agradecer entre nosotras, la verdad.
¿Cómo va a ser el concierto de Bilbao?
Charlotte: Estamos haciendo cositas nuevas, cambiando el set, llevamos mucho con el mismo, así que están empezando a fluctuar el orden de las canciones, habrá algo nuevo… pero, como Shego ganamos mucho en directo, pues que la gente se venga y listo.
Va a seguir habiendo pogo, en cualquier caso.
Raquel: Cien por cien.
Maite: Más que nunca, de hecho.
Charlotte: ¡Sí!
