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More Than Words: crónica del concierto de Extreme y Eldorado en Bilbao (28-VI-2014)

La banda estadounidense se halla en plena gira 25º aniversario de «Pornograffitti», el histórico disco que contribuyó al devenir posterior del rock, hacia terrenos distintos al hard rock y el heavy metal de la década de los 80. En la sala Santana 27 actuaron junto a los madrileños Eldorado. Nos lo cuenta Antonio Refoyo, con fotos de Mari Jose Martín


La banda estadounidense se halla en plena gira 25º aniversario de «Pornograffitti», el histórico disco que contribuyó al devenir posterior del rock, hacia terrenos distintos al hard rock y el heavy metal de la década de los 80. En la sala Santana 27 actuaron junto a los madrileños Eldorado. Nos lo cuenta Antonio Refoyo, con fotos de Mari Jose Martín


 

Se viene poniendo de moda en los últimos tiempos celebrar los aniversarios de emblemáticos discos con la interpretación íntegra de ellos por parte de sus creadores. Uno de esos discos clave de nuestra música es «Pornograffitti«, cuyo 25º aniversario ha dado pie a que Extreme lleve realizando en este 2014 una gira especial con la interpretación de aquella joya que permanecerá en los anales de la historia del rock eternamente. La banda entró a grabarlo en 1989, aunque su edición no se realizaría hasta 1990. Una época con vientos de cambio en el rock hacia terrenos distintos al hard rock y el heavy metal que habían predominado en la década anterior. En ese ambiente, el grupo estadounidense fue un soplo de frescura que, sin dejar de ser una  banda para el gusto de los seguidores clásicos, fusionaba otros elementos que dotaban de nueva vida a la escena. Todavía, a día de hoy, es una de esas bandas genuinas, con un toque único y una influencia para lo que vino después, llegando sus canciones hasta nuestros días con total vigencia. Una originalidad que tanto cuesta encontrar y que parece estar siempre presente en bandas cuyo nombre se escribe con mayúsculas, dejando obras que solo consiguen mejorar con el tiempo y que nunca se quedan rezagadas ante lo nuevo que nos van ofreciendo nuestros grupos.

 

Llegaron a Bilbao el pasado 28 de junio, acompañados de Eldorado, una banda que aspira a conseguir precisamente todo eso, aunque en territorio estatal les esté costando conseguir el reconocimiento acorde a la calidad de sus tres trabajos editados hasta la fecha. Parece que a nivel internacional se están rodando más los madrileños, con lo que optaron en esta ocasión por ofrecernos su repertorio en inglés. Esta fue la manera de expresarse en sus canciones de Jesús Trujillo, sorprendiendo desde el inicio con «La casa de las 7 chimeneas» en su versión anglosajona.

 

eldorado bilbao live bifmEldorado // Mari Jose Martín

 

Teniendo en cuenta la poca presencia de público en sus anteriores visitas a Bizkaia, les debió saber a gloria tocar ante una audiencia como la de Extreme, que supo valorar lo ofrecido por Eldorado ante el desconocimiento general. Pero es que la banda rehusó ir a lo seguro, ni tan siquiera para los que sí los hemos seguido desde el principio, ya que nos presentaron un puñado de temas nuevos como fueron «I’ll Be Satisfied«, «Flowers Of Envy» y «Mad Woman«.

 

El regusto tradicional de su música está impregnado de un halo de novedad que ya nos demostraron en cada uno de sus trabajos editados hasta la fecha. Con Trujillo alternando fantásticamente la labor de vocalista y teclista aquello sonó de lujo, sin desmerecer en nitidez y potencia a lo que luego ofrecería Extreme. Eldorado  aderezaron el repertorio con la versión del «Helter Skelter» de The Beatles en una actuación donde además presentaron a Christian Giardino, hijo del guitarrista de Rata Blanca Walter Giardino, como nuevo batería de la formación, resultando impactante su actuación en el plano personal. Aunque la banda pueda pecar de cierta sobriedad, característica propia de su personalidad, realzaron una actuación brillante que cosechó significativas ovaciones por parte del selecto público de Extreme. Un público que sabe distinguir propuestas de calidad y que resultó gratamente sorprendido por Eldorado.

 

eldorado bilbao bajo live bifmLa base rítmica de Eldorado // Mari Jose Martín

 

Aunque para los madrileños fuera una buena oportunidad de darse a conocer ante más público la sala no registró el lleno que merecería una gira como ésta. El precio de las entradas, la falta de dinero por parte del público en medio de una crisis que no levanta pese a lo que nos digan y la época veraniega llena de festivales y conciertos al aire libre en fiestas y otros emplazamientos nos podía hacer esperar algo así. Pero no quedó una noche fría ni mucho menos. De hecho, hacía mucho calor en Santana 27, pese a que fuera tuviéramos un sábado pasado por agua.

 

Los presentes se deleitaron con una actuación mucho más que cumplidora por parte de la banda americana. Si bien hubo algún aspecto que les impidió llegar a la perfección y a causar el total impacto que el repertorio y la puesta en escena del grupo podían haber logrado, Extreme rayó a una tremenda altura. La esperada, como mínimo. Los problemas con el micro de la primera parte de la actuación, que parecían incomodar a Gary Cherone, fueron uno de los aspectos que deslucieron un tanto ese tramo inicial de concierto. Fuera del escenario se le escuchaba más alto de lo que la guitarra de Nuno Bettencourt requería, ya que a veces se la comía, pero dentro el vocalista parecía estar incómodo por no escucharse del todo bien y fueron constantes sus paseos hacia la mesa de sonido del lateral del escenario.

 

Pese a ello no dejó de moverse con energía y vitalidad. Con el pelo ahora nuevamente largo parecía tener la intención de rememorar de lleno aquel año 1990, recordando su salida al escenario con «Decadence Danze» a las propias imágenes del videoclip de este tema con él arrancando encaramado a la plataforma de la batería. Ahí comenzó Gary Cherone a cantar y desde entonces no paró de moverse mostrando un gran estado de forma, dejando el micro en algún momento a su compañero al bajo Pat Badger, que demostró tener un gran registro vocal para compartir esa faceta.

 

«Pornograffitti» fue interpretado de cabo a rabo en el mismo orden que el propio álbum, pero con estos temas expuestos en un directo muy orgánico donde no se esconden demasiados artificios, con los coros de Bettencourt y Badger llevados a rajatabla, pero con crudeza y un vocalista que no dudó en ofrecer el micro al respetable en múltiples ocasiones.

 

La actuación le fue favorable al grupo desde el principio, continuando cuesta abajo con «Li’l Jack Horny» y «When I´m President» llegando a un «Get The Funk Out» que no por ser uno de los temas más sobados de la banda dejó de resultar uno de los más álgidos momentos de la descarga no solo en cuanto a respuesta de público, sino ejecución de la banda. Pero si hay un tema de Extreme del que podríamos estar ya un tanto cansados por haber traspasado los límites de lo comercial es «More Than Words«, la cual en cualquier caso me sigue pareciendo una balada de lo más brillante y original. Si este iba a ser irremisiblemente el momento mojabragas, unas palabras de Nuno Bettencourt al sentarse con su acústica acrecentaron las emociones desde el principio. Un principio en el que el público a capela fue quien arrancó este emblemático y básico tema de la homenajeada obra. Precioso escuchar a la sala junto a la banda.

 

extreme bilbao live guitar bifmNuno Bettencourt // Mari Jose Martín

 

Pero Extreme es mucho más que una o dos canciones. Es una banda a tener en cuenta por cada uno de su pasos discográficos y cada uno de sus temas, que siempre aportan dinamismo y distinción, así que pasados esos dos momentos consecutivos y centrales rescatados de aquel mítico LP, todavía nos quedaban temas tan significativos como «Money (In God We Trust)«, «It’s (A Monster)» o el homónimo «Pornograffitti», con una banda en perfecta sincronía, con química entre ellos y conexión con el personal.

 

En «When I First Kissed You» vimos a Nuno al teclado y a Pat tocando una especie de contrabajo, pero evidentemente esta balada no equipara en emociones a lo que ya habíamos vivido. Tras «Suzie (Wants Her All Day What?)«, cuyo trabajo vocal en coros y voz principal es de subrayar, nos encontramos con el hacha versionando «Flight Of he Wounded Bumblee» para dar paso a «He-Man Woman Hater«, seguida de «Song For Love» dando carpetazo a la parte de «Pronografittii» con «Hole Heatred«. Siempre he dicho que toda gran obra se termina de manera especial y esta era la guiñada de «Pornograffitti», llevada al directo con un esplendido Kevin Figueiredo a la batería durante toda la descarga, que en este tema sale a golpear simplemente un bombo y un plato, mientras Nuno se vuelve a colgar la acústica. Diría que en una tesitura relajada incluso superó a las dos baladas anteriormente ejecutadas.

 

Brillante interpretación con una puesta en escena en la que la energía de la banda, la calidad de sus músicos y la hiperactividad de un extreme bilbao live vertical2 bifmmotivado Cherone fueron el mejor espectáculo para acompañar al nivel de estas canciones. Pero no terminaba el concierto ni nos llevaban aun a los bises, ya que nos ofrecieron la versión del «Crazy Little Thing Called Love» de Queen. Punto y seguido para dejar pendiente el repaso a otros discos de su carrera que vendrían en la recta final.

 

No quisieron los americanos romper la magia existente arriesgándose a presentar nuevos temas o rescatando algo de su último «Saudades De Rock«, ya que los cinco temas que nos quedaban nos seguían haciendo mirar a la primera mitad de los 90 en los que consiguieron el éxito. Incluso al año 89 con «Play With Me» de su homónimo «Extreme» (1989), haciendo que el personal siguiera metido en la descarga, sin desconectar de la misma en temas tan excelentemente recibidos como «Rest In Peace«, este ya se  su obra del 92 «Sides To Every Story«, al que también pertenecen «Am I Ever Gonna Change» y «Cupid’s Dead«. Hubo un hueco especial para «Midnight Express«, ya de su última obra de la épica gloriosa del grupo que se cerró con el lanzamiento de «Waiting For The Punchline» en 1995. Este fue un momento especial con Bettencourt ofreciendo un solo de guitarra acústica que levantó la admiración del respetable probablemente hasta el nivel más alto de la noche.

 

Pero si bien «Pornograffitti» es un disco imprescindible, Extreme dejaron claro en este directo el por qué de la diferenciación de su sonido con respecto a cualquier banda de su época e incluso de la actualidad. Su nivel en ejecución de los temas así lo mostraron, llevando consigo además una clara intención de agradar y conectar con su público. Que todo el mundo quedara satisfecho sabiendo que esta era una gira especial y probablemente irrepetible.

 

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