Hablamos con el cantante con motivo de la presentación de «Pequeños trastornos sin importancia». El exvocalista del Hombre Burbuja nos explica el porqué de las canciones de su nuevo trabajo, así como sobre su llamativa portada
Tras su recorrido con El Hombre Burbuja, donde se dio a conocer como vocalista, Julio de la Rosa decidió comenzar su carrera en solitario lanzándose con «M.O.S» (Recordings From The Other Side / Everlasting, 2004), el que fue el primer disco de los cinco que ha publicado hasta la fecha (sin contar el proyecto Fantasma #3). Ahora está de plena actualidad por «Pequeños trastornos sin importancia» (Ernie Records, 2013), un nuevo álbum sobre el que nos habló en Días de Radio el pasado viernes 1 de febrero.
Tres años después de la publicación de su anterior disco, «La Herida Universal«, este nuevo trabajo sería justo la cara opuesta, según sus propia palabras. «He intentado dejar la mayoría de las canciones abiertas para que se puedan extrapolar a cualquier tipo de relación personal, no tiene porqué ser una relación de amor«.
«Pequeños trastornos sin importancia» cuenta con la colaboración de muchos artistas invitados como Xoel López, Bunbury, Ana de Coffe&Wine, Miren Iza de Tulsa, Ainara LeGardon, Juan Alberto de Niños Mutantes, Miguel Rivera de Maga o Anni B Sweet, entre otros. «Para la maqueta grababa mi voz, sobre la mía grababa otra melodía y sobre esa melodía hacía otro coro. Sonaba un poco raro, por eso pensé que era un buen momento para pedir ayuda a amigos de la profesión, que sustituyeran esas voces mías por las suyas propias«. Además de los vocalistas que colaboran en el LP, de la Rosa ha contado con un equipo instrumental de lujo (los mismísimos Havalina como banda) y con la ayuda de diferentes fotógrafos y modelos para el diseño del libreto.
CONTROVERTIDA PORTADA
La imagen de portada, donde se puede ver al artista llevando a una mujer atada con una correa como si fuera un perro, alude al título del disco. Con ella, el cantautor intenta provocar, mover a pensar, nada que ver con una muestra de misoginia o de machismo en el pop. «Quien piense que la portada es machista no tiene ni puta idea de lo que dice. Obviamente es una foto fuerte a simple vista, pero creo que no hay que ser muy inteligente para darse cuenta de que estamos hablando de otra cosa. Lo interesante de esta portada son los cuatro trastornos que se pueden ver: la chica que se cree un perro, el chico que la lleva atada, el gato que ve a una chica y cree que es un perro y el último y más importante, la persona que mira esa foto«. ¿Y no resultará controvertida? «Toda esta gente que puede rajar sobre la portada es gente que está acostumbrada a que le muestren el horror y la violencia en el cine, en los telediarios y en otras artes, pero no está acostumbrada a verlos en el pop y en el rock. Lo único que demuestra eso es la poca calidad artística que hay en el pop y en el rock«.
Además de presentar el disco y empezar con la promo del mismo, el polifacético músico sigue ligado al cine (tiene entre manos una nominación a los Goya -por la banda sonora de «Grupo 7«-), y a la literatura (está a punto de presentar su primera novela -«Peaje«-). «Lo que para unos es trabajo, para mí es diversión«, asegura.
Podcast: Escucha o descarga la entrevista íntegra a Julio de la Rosa
