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Puro teatro (marzo): El «Señoricidio» de Irantzu Varela

La periodista, activista y divulgadora feminista cierra en Bilbao la gira de su excelente y combativo monólogo. Además, en Pabellón 6…

Irantzu Varela en "Señoricidio"
La periodista, activista y divulgadora feminista cierra la gira de «Señoricidio», su excelente y combativo monólogo, el próximo domingo en el Kafe Antzokia (Bilbao) rodeada de amigues e invitades. Además, en Pabellón 6, el musical de pequeño formato «Con lo bien que estábamos (Ferretería Esteban)»

Dado que los 8M no parecen servir de mucho y las cosas no terminan de cambiar, ¿por qué no salir a la calle a arreglar a tiros lo que lleva siglos necesitando ser arreglado? Entiéndaseme la hipérbole, que hablamos desde el humor y la metáfora, no nos vaya a denunciar ahora algún señoro ofendidito por apología de la violencia… Pero, básicamente, eso es lo que Irantzu Varela propone en su monólogo «Señoricidio»; en sus propias palabras: «Hacer risas por no hacer lo que haríamos si pudiéramos». Porque, y esto ya son palabras mías, quizá el feminismo es la revolución más lenta de la historia por no haber usado jamás la violencia, ni siquiera para defenderse de la que recibe constantemente.

En fin, no nos vayamos por derroteros sociológicos y a lo que íbamos, que esto es una sección de artes escénicas. La periodista, activista, divulgadora, cómica… basauritarra Irantzu Varela ya había hecho monólogos anteriormente, pero ahora en su espectáculo «Señoricidio» se supera a sí misma con una joya-bomba de relojería que lleva meses girando y que termina viaje en el bilbaíno Kafe Antzokia el próximo domingo (24 de marzo), rebautizado como «Señoricidio final» para la ocasión (en la que, además de su actuación, habrá invitades varies que a saber con qué locuras nos deleitarán).

Tras un breve pero potentísimo arranque (Najwa Nimri atronando con su «Panpan» y proyecciones de arte combativo creado por mujeres), «Señoricidio» es una hora de pura batalla (cómico-dialéctica) contra estructuras anquilosadas y caducas pero que se resisten a morir y piden a gritos un toque de gracia. Ella misma lleva tiempo currándose esa estocada final al heteropatriarcado turbocapitalista y, en este espectáculo (que escribe, dirige e interpreta en solitario), lo vuelve a hacer pero a través de un monólogo muy, muy cómico; aunque lo que denuncie en él sea algo muy serio y sin puñetera gracia.

Porque la genialidad de Varela es que hace ver que la función está basada en esa técnica humorística básica del stand up comedy de la exageración extrema y el exceso, pero lo que ella expone aquí es una realidad palmaria que no necesita ser amplificada (el sangrante machismo imperante), y lo que propone (acabar con él a tiros) es, muy probablemente, la forma en la que el hombre blanco heterosexual habría reaccionado hace ya tiempo si estuviera en el otro lado.

Señoricidio

Cartel de «Señoricidio» en Kafe Antzokia (Bilbao)

Puede que en «Señoricidio» falle en momentos puntuales el hilo del guion; también rompe el ritmo el excesivo apoyo de la protagonista en los folios sobre el atril. Pero, aunque esto no deje de ser teatro, aquí lo verdaderamente importante no es ni lo puramente dramatúrgico ni la actuación, sino el discurso y el tono del mismo. Y eso, para mí, Varela lo clava. Tras esa apariencia de arenga populista disparatada y espídica, «Señoricidio» nos regala un show de stand up comedy al uso (no vengas tampoco buscando un sesudo tratado feminista), pero mucho más profundo, interesante, trabajado y divertido que prácticamente todo lo que servidor ha visto en este género.

Como espectáculo de humor espoleante (de esos que te hacen reír y pensar a partes iguales), a mí me parece impecable. Es más, se sale del teatro con las pistolas, ¡perdón!, con las pilas bien cargadas para terminar de cambiar y equilibrar las cosas. Qué necesaria la gente que nos espabila, aunque sea a hostias o a tiros (figurados), para que avancemos y mejoremos. Seguramente el tiempo le reconocerá a Varela el valor de poner la cara en una lucha que no le está exigiendo pocos peajes ni granjeando pocos odios.

Irantzu Varela

«CON LO BIEN QUE ESTÁBAMOS (FERRETERÍA ESTEBAN)» EN PABELLÓN 6

Además, este mismo fin de semana (del 22 al 24 de marzo), la sala de Zorrotzaurre Pabellón 6 acoge la vuelta a Bilbao del musical de pequeño formato «Con lo bien que estábamos (Ferretería Esteban)». Este espectáculo ganó en 2021 los Premios Max a Mejor composición musical para espectáculo escénico (Mariano Marín) y Mejor labor de producción, y estuvo nominado también como Mejor espectáculo musical o lírico.

Escrito y dirigido por el gran José Troncoso y atinadamente interpretado por Carmen Barrantes y Jorge Usón (con Néstor Ballesteros al piano), narra la anodina y repetitiva vida del matrimonio que regenta la ferretería del título. Un día, acuden al teatro y y ese será el detonante de una nueva manera de ver el mundo: con ilusión, con sueños, con aspiraciones, con ganas de hacer, probar y, verdaderamente, por fin, vivir.

«Con lo bien que estábamos (Ferretería Esteban)» // Javier Naval

El ritmo de la función está muy conseguido, los actores brillan (hay escenas impagables en las que se lucen, como la que ejemplifica la monotonía de su trabajo en la ferretería), la música luce y engancha. Por eso, y a pesar de lo excesivamente esquemático y simple de su guion (uno esperaba que la historia y el arco de sus personajes dieran para bastante más), estamos ante un show muy disfrutable que merece la pena ver en la intimidad de un espacio de cercanía como Pabellón 6.

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